Páginas

lunes, 25 de enero de 2016

PABLO LO SUFRIÓ TODO POR AMOR A CRISTO



FIESTA DE LA CONVERSIÓN DE SAN PABLO.

Qué es el hombre, cuán grande su nobleza y cuánta su capacidad de virtud lo podemos colegir sobre todo de la persona de Pablo. Cada día se levantaba con una mayor elevación y fervor de espíritu y, frente a los peligros que lo acechaban, era cada vez mayor su empuje, como lo atestiguan sus propias palabras: Olvidando lo que queda atrás y lanzándome hacia lo que veo por delante; y, al presentir la inminencia de su muerte, invitaba a los demás a compartir su gozo, diciendo: Alegraos y congratulaos conmigo; y, al pensar en sus peligros y oprobios, se alegra también y dice, escribiendo a los corintios: Vivo contento en medio de mis debilidades de los insultos y de las persecuciones; incluso llama a estas cosas armas de justicia, significando con ello que le sirven de gran provecho.

Y así, en medio de las asechanzas de sus enemigos, habla en tono triunfal de las victorias alcanzadas sobre los ataques de sus perseguidores y, habiendo sufrido en todas partes azotes, injurias y maldiciones, como quien vuelve victorioso de la batalla, colmado de trofeos, da gracias a Dios, diciendo: Gracias sean dadas a Dios, que en todo tiempo nos lleva en el cortejo triunfal de Cristo. Imbuido de estos sentimientos, se lanzaba a las contradicciones e injurias, que le acarreaba su predicación, con un ardor superior al que nosotros empleamos en la consecución de los honores, deseando la muerte más que nosotros deseamos la vida, la pobreza más que nosotros la riqueza, y el trabajo mucho más que otros apetecen el descanso que lo sigue. La única cosa que él temía era ofender a Dios; lo demás le tenia sin cuidado. Por esto mismo, lo único que deseaba era agradar siempre a Dios.

Y, lo que era para él lo más importante de todo, gozaba del amor de Cristo; con esto se consideraba el más dichoso de todos, sin esto le era indiferente asociarse a los poderosos y a los príncipes; prefería ser, con este amor, el último de todos, incluso del número de los condenados, que formar parte sin él, de los más encumbrados y honorables.

Para él, el tormento más grande y extraordinario era el verse privado de este amor: para él, su privación significaba el infierno, el único sufrimiento, el suplicio infinito e intolerable.

Gozar del amor de Cristo representaba para él la vida, el mundo, la compañía de los ángeles, los bienes presentes y futuros, el reino, las promesas, el conjunto de todo bien; sin este amor, nada catalogaba como triste o alegre. Las cosas de este mundo no las consideraba, en sí mismas, ni duras ni suaves.

Las realidades presentes las despreciaba como hierba ya podrida. A los mismos gobernantes y al pueblo enfurecido contra él les daba el mismo valor que a un insignificante mosquito.

Consideraba como un juego de niños la muerte y la más variada clase de tormentos y suplicios, con tal de poder sufrir algo por Cristo.

De las Homilías de san Juan Crisóstomo, obispo
(Homilía 2 sobre las alabanzas de san Pablo: PG 50. 477·480) 



Suscribite y recibí todas las actualizaciones en tu E-mail.
También podes seguir este blog a través de facebook: AÑO DE LA FE. (Grupo) Vivamos juntos la Fe (Fanpage) y en Twitter: @VivamoslaFe

sábado, 23 de enero de 2016

Canonización de Cura Brochero - Mensaje de Mons. Olivera


Mensaje de Mons. Santiago Olivera (22/01/2016)

“Hoy el papa Francisco autorizó al cardenal Angelo Amato SDB, prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos, la promulgación del decreto por el cual se reconoce un milagro atribuido a la intercesión del beato José Gabriel del Rosario Brochero, milagro que permitirá su canonización. 

Para nosotros, para la Argentina, para la diócesis de Cruz del Eje, sin lugar a dudas es una gracia muy grande que recibimos de Dios y que nos llena de una gran alegría. 

El primer sentimiento que surge es de verdadera gratitud a Dios por este regalo, el milagro de la curación de una niña de San Juan en circunstancias difíciles. Sin embargo, como las manifestaciones del Padre Brochero, este milagro es en clave pascual, con dolor y con fiesta, con dificultades serias, con entrega y con vida. 

Gratitud también al cura Brochero por su intercesión. El pueblo sabe que es su intercesor y experimentamos, a través de esta gracia, que Dios escucha la oración de su pueblo. 

Nos llena de alegría celebrar la próxima canonización. También nos obliga a no sólo alegrarnos por tener este modelo y este ejemplo de cristiano, sino también el recuerdo permanente de que la santidad es el camino que todos nosotros debemos transitar. Porque un santo nos recuerda que es posible responder a nuestra vocación bautismal, que tantas veces lo escuchamos y lo decimos, pero aun así nos sabemos pobres y frágiles. 

Esta realidad nos recuerda que es posible vivir la santidad, por eso elevamos los ojos al cielo en este Año Santo, contemplamos la Misericordia de Dios que nos da este regalo y que ha querido que la comunicación de la canonización de Brochero llegue en el año del 150 aniversario de su ordenación sacerdotal. 

“Tú eres sacerdote para siempre”, decimos en el salmo. Brochero sigue intercediendo por su pueblo como buen sacerdote, como sacerdote fiel. . Como buen pastor, sigue pasando por nuestra vida haciendo el bien. 

La historia nos marca el camino 
Para nosotros los diocesanos también es muy significativo este segundo milagro ocurrido en San Juan, porque nuestro primer obispo, monseñor Enrique Pechuán Marín, era oriundo de esa arquidiócesis. El primer milagro, lo sabemos, fue en la arquidiócesis de Córdoba, de donde era oriundo nuestro segundo obispo, monseñor Omar Colomé. De alguna manera siento y sentimos la presencia de la historia. 

Comenzó esta causa de canonización monseñor Pechuán Marín, la continuó monseñor Colomé y gracias a Dios, en este momento de la historia, me tocó a mí completarla. Sin duda, hubo muchas personas que trabajaron y aportaron para que esto sea posible. “Lo que el árbol tiene de florido le viene de lo que tiene sepultado”. Muchas vidas, muchos esfuerzos, mucho trabajo. 

Agradecimientos
Agradezco a los postuladores como el padre Molinari y el padre Gumplel, sacerdotes de la Compañía de Jesús; a la actual postuladora Dra. Silvia Correale, que tanto hizo en esta etapa desde la beatificación hasta nuestros días; a los vicepostuladores, historiadores, obispos, como el cardenal Raúl Primatesta y monseñor Carlos Ñáñez, arzobispos de Córdoba y los que han colaborado desde esa arquidiócesis para la causa. Agradezco también el trabajo de monseñor Alfonso Delgado, arzobispo de San Juan de Cuyo y sus colaboradores que instruyeron el proceso de este milagro que la Santa Sede confirma. Todos trabajaron para que hoy esto se concrete y la Iglesia en la Argentina cuente con este modelo admirable e imitable de buen pastor, en el año del bicentenario de nuestra independencia, en el año de la Misericordia, en el año de su ordenación sacerdotal. Sin duda la providencia nos ha regalado todo esto. 

Santos Guayama
No puedo dejar de pensar en Santos Guayama, ese gaucho sanjuanino líder de la “rebelión lagunera”, siempre perseguido por la justicia. El corazón del buen pastor, el corazón de Brochero, quería salvar el alma de Santos Guayama y con él a toda su gente. Quería llevarlos al encuentro con Jesús. En San Juan, Santos Guayama encontró la muerte y no pudo Brochero lograr su objetivo. Ahora de San Juan surge este milagro, esta manifestación del Señor. Quiera Dios que para los sanjuaninos y para todos, éste sea el signo de la salvación que Brochero quiere darnos en este año en que tenemos que contemplar y ser testigos de la misericordia. Que este acontecimiento que nos toca vivir nos renueve y nos entusiasme al sabernos amados y mirados particularmente por el Señor. 

Semana Brocheriana
Celebremos solemnemente las Eucaristías en lo que queda de la Semana Brocheriana. Celebremos la fiesta de clausura el 26 de enero, en la que presidirá la Eucaristía el cardenal Mario Poli. Doy gracias a Dios porque la providencia nos regala también su presencia en este momento histórico de la causa. Espero encontrarnos. Recemos y con mucho afecto les doy mi bendición”.+
Mons. Santiago Olivera+








Fuente: Facebook-Diocesis De Cruz Del Eje


Entradas Relacionadas:
El Beato Cura Brochero camino a su canonización



Suscribite y recibí todas las actualizaciones en tu E-mail.
También podes seguir este blog a través de facebook: AÑO DE LA FE. (Grupo) Vivamos juntos la Fe (Fanpage) y en Twitter: @VivamoslaFe

domingo, 10 de enero de 2016

Fiesta del Bautismo del Señor - Reflexión





Evangelio según San Lucas 3,15-16.21-22.
Como el pueblo estaba a la expectativa y todos se preguntaban si Juan no sería el Mesías, él tomó la palabra y les dijo: "Yo los bautizo con agua, pero viene uno que es más poderoso que yo, y yo ni siquiera soy digno de desatar la correa de sus sandalias; él los bautizará en el Espíritu Santo y en el fuego. Todo el pueblo se hacía bautizar, y también fue bautizado Jesús. Y mientras estaba orando, se abrió el cielo y el Espíritu Santo descendió sobre él en forma corporal, como una paloma. Se oyó entonces una voz del cielo: "Tú eres mi Hijo muy querido, en quien tengo puesta toda mi predilección".

Lo primero que nos relata este Evangelio es la espera del pueblo, “estaban a la expectativa”, esperaban al Mesías, como nosotros que esperamos muchas veces la manifestación de Dios en grandes milagros pero él se manifiesta en las cosas sencillas de cada día, no nos dejemos engañar por falsos mesías o falsas promesas que en definitiva no llenaran nuestro corazón y sepamos escuchar a aquellos que como Juan nos anuncian al verdadero mesías.

En segundo lugar Juan humildemente se reconoce menor que Jesús y menciona un bautismo en el Espíritu y en el fuego, es decir, ese fuego que viene a quemar todas las impurezas del pecado.

Por otros relatos bíblicos sabemos que Jesús pide ser bautismo, Juan se niega porque se reconoce indigno ante el Señor pero Jesús afirma que es necesario que él mismo sea bautizado por Juan. ¿Realmente era necesario para Jesús someterse a un rito de purificación como el resto del pueblo?  No, Jesús no tenía necesidad de ser purificado pero si era necesario para que se confirme la presencia del Mesías y para que Dios se manifieste de forma trinitaria, el Hijo Dios hecho hombre que recibe el bautismo, el Espíritu Santo que desciende al mundo, el Padre, que con su voz confirma a su hijo como el Mesías que el pueblo esperaba, es decir, el bautismo es una Teofanía (Manifestación de Dios)

Jesús, el Hijo de Dios, se hizo hombre y recibió el bautismo, nosotros que somos hombres por el bautismo trinitario nos hacemos hijos de Dios. Dios desciende al mundo y se manifiesta a los hombres, nosotros estamos invitados a ascender al encuentro con él.

Por último, sería lindo que celebremos también nuestro bautismo como nuestro cumpleaños, para recordar así aquel día que recibimos esta bendición de ser hijos de Dios y que nos hicimos miembros de la Iglesia de Cristo.


Feliz Domingo. Que Dios los colme de bendiciones.



Suscribite y recibí todas las actualizaciones en tu E-mail.
También podes seguir este blog a través de facebook: AÑO DE LA FE. (Grupo) Vivamos juntos la Fe (Fanpage) y en Twitter: @VivamoslaFe

jueves, 7 de enero de 2016

MI HUMILDE PESEBRE





Queridos amigos hoy quiero compartir con ustedes mi humilde pesebre:

Maria: Mujer del gran Si, servidora fiel del Señor, modelo de madre, la llena de gracia y quizás me falten palabras para definir a la gran madre que recibimos aquel día de la crucifixión de Jesús.
María al recibir el anuncio del angél respondió:
  «Yo soy la servidora del Señor, que se cumpla en mí lo que has dicho» (Lc 1,38)

Ella es nuestra madre, nuestro modelo de fe que nos debe animar a aceptar día a día la voluntad de Dios, también nos enseña a mantenernos firmes ante el dolor entregandonos en su brazos y confiando en la fuerza que viene de Dios.

José: Aquel hombre que en sueños escuchaba la voz de Dios y cumpliá su voluntad.
"El Angel del Señor se le apareció en sueños y le dijo: «José, hijo de David, no temas recibir a María, tu esposa, porque lo que ha sido engendrado en ella proviene del Espíritu Santo. Al despertar, José hizo lo que el Angel del Señor le había ordenado: llevó a María a su casa." (Mt 1,20.24)

En José encontramos el dilema entre Razón y Fe, le costaba aceptar desde la razón pero al escuchar la voz de Dios en sueños acepta por fe su voluntad.
A veces no comprendemos los designios de Dios pero tratemos de mirarlos con ojos de fe para poder aceptarlos.

Jesús: Sin duda, el gran protagonista del pesebre, aquel Dios que se hizo hombre para nuestra salvación.
 "El, que era de condición divina, no consideró esta igualdad con Dios como algo que debía guardar celosamente: al contrario, se anonadó a sí mismo, tomando la condición de servidor y haciéndose semejante a los hombres. Y presentándose con aspecto humano, se humilló hasta aceptar por obediencia la muerte y muerte de cruz. (Filipenses 2,6-8) 

Nuestro salvador nació en un pesebre, eligió la sencillez y la humildad para venir al mundo y entregar su vida por la salvación de todos asumiendo nuestros pecados. Él nos dice: "Vengan a mí todos los que están afligidos y agobiados, y yo los aliviaré." (Mt 11,28)

Corderos: También he colocado una familia de corderos por la profecia de Isaías: "Al ser maltratado, se humillaba y ni siquiera abría su boca: como un cordero llevado al matadero, como una oveja muda ante el que la esquila, él no abría su boca. Fue detenido y juzgado injustamente, y ¿quién se preocupó de su suerte? Porque fue arrancado de la tierra de los vivientes y golpeado por las rebeldías de mi pueblo. (Is 53,7-8)

Jesús será aquel cordero muerto en la cruz, crucificado por su pueblo. Ya que desde su nacimiento en el pesebre hasta su muerte en la cruz se cumple la promesa de Dios.

Pastor con un candíl: También he colocado un pastor con un candil que trae la luz, ya que el mismo Jesús es la luz que viene a iluminar nuestras vidas para sacarnos de la oscuridad del pecado.  
"Jesús les dirigió una vez más la palabra, diciendo: «Yo soy la luz del mundo. El que me sigue no andará en tinieblas, sino que tendrá la luz de la Vida»." (Jn 8,12)

La estrella: Es la guía del Espíritu Santo que nos lleva a Jesús, nuestro rey y salvador, seamos perseverantes siguiendo en las tinieblas de la noche la luz de la estrella. También debemos ser estrella para otros y guiarlos hasta el encuentro con Jesús.
«¿Dónde está el rey de los judíos que acaba de nacer? Porque vimos su estrella en Oriente y hemos venido a adorarlo». (Mt 2,2)



Los Reyes Magos: "Cuando nació Jesús, en Belén de Judea, bajo el reinado de Herodes, unos magos de Oriente se presentaron en Jerusalén y preguntaron: "¿Dónde está el rey de los judíos que acaba de nacer? Porque vimos su estrella en Oriente y hemos venido a adorarlo. 
 La estrella que habían visto en Oriente los precedía, hasta que se detuvo en el lugar donde estaba el niño. Cuando vieron la estrella se llenaron de alegría, y al entrar en la casa, encontraron al niño con María, su madre, y postrándose, le rindieron homenaje. Luego, abriendo sus cofres, le ofrecieron dones: oro, incienso y mirra." (Mt 2, 1-2. 9-11)

Los Reyes nos enseñan que tenemos que ofrecer lo que tenemos a Jesús para honrarlo como nuestro rey y salvador. Que el Espíritu Santo nos guíe para entregarnos día a día como ofrenda de amor al Padre. 


Suscribite y recibí todas las actualizaciones en tu E-mail.
También podes seguir este blog a través de facebook: AÑO DE LA FE. (grupo) Vivamos juntos la Fe (fanpage) y en Twitter: @VivamoslaFe

viernes, 1 de enero de 2016

EL VERBO TOMÓ DE MARÍA UN CUERPO SEMEJANTE AL NUESTRO




1 de enero
SANTA MARÍA, MADRE DE DIOS. (SOLEMNIDAD) 


El Verbo de Dios tomó la descendencia de Abraham, como dice el Apóstol; por eso debía ser semejante en todo a sus hermanos, asumiendo un cuerpo semejante al nuestro. Por eso María está verdaderamente presente en este misterio, porque de ella el Verbo asumió como propio aquel cuerpo que ofreció por nosotros. La Escritura recuerda este nacimiento, diciendo: Lo envolvió en pañales; alaba los pechos que amamantaron al Señor y habla también del sacrificio ofrecido por el nacimiento de este primogénito. Gabriel había ya predicho esta concepción con palabras muy precisas; no dijo en efecto: «Lo que nacerá en ti», como si se tratara de algo extrínseco, sino de ti, para indicar que el fruto de esta concepción procedía de María.

El Verbo, al recibir nuestra condición humana y al ofrecerla en sacrificio, la asumió en su totalidad, y luego nos revistió a nosotros de lo que era propio de su persona, como lo indica el Apóstol: Esto corruptible tiene que vestirse de incorrupción, y esto mortal tiene que vestirse de inmortalidad.

Estas cosas no se realizaron de manera ficticia, como algunos pensaron -lo que es inadmisible-, sino que hay que decir que el Salvador se hizo verdaderamente hombre y así consiguió la salvación del hombre íntegro; pues esta nuestra salvación en modo alguno fue algo ficticio ni se limitó a solo el cuerpo, sino que en el Verbo de Dios se realizó la salvación del hombre íntegro, es decir, del cuerpo y del alma.

Por lo tanto, el cuerpo que el Señor asumió de María era un verdadero cuerpo humano, conforme lo atestiguan las Escrituras; verdadero, digo, porque fue un cuerpo igual al nuestro. Pues María es nuestra hermana, ya que como todos nosotros es hija de Adán.

Lo que dice Juan: La Palabra se hizo carne, tiene un sentido parecido a lo que se encuentra en una expresión similar de Pablo, que dice: Cristo se hizo maldición por nosotros. Pues de la unión íntima y estrecha del Verbo con el cuerpo humano se siguió un inmenso bien para el cuerpo de los hombres, porque de mortal que era llegó a ser inmortal, de animal se convirtió en espiritual y, a pesar de que había sido plasmado de tierra, llegó a traspasar las puertas del cielo.

Pero hay que afirmar que la Trinidad, aun después de que el Verbo tomó cuerpo de María, continuó siendo siempre la Trinidad, sin admitir aumento ni disminución; ella continúa siendo siempre perfecta y debe confesarse como un solo Dios en Trinidad, como lo confiesa la Iglesia al proclamar al Dios único, Padre del Verbo.

De las Cartas de san Atanasio, obispo
(Carta a Epicteto, 5-9: PG 26, 1058. 1062-1066)

Suscribite y recibí todas las actualizaciones en tu E-mail.
También podes seguir este blog a través de facebook: AÑO DE LA FE. (Grupo) Vivamos juntos la Fe y en Twitter: @VivamoslaFe